¿Estoy en la Tele?

La television espera que seamos “algo”, lo importante es saber “que”.

La television espera que seamos “algo”, lo importante es saber “que”.

Hace algunos días, un amigo se dio a la tarea de mostrarme lo que el llamaba “la máxima talla del trece”, la cual consistía en un video grabado del matinal del mencionado canal, correspondiente al día siguiente del partido por la eliminatorias del mundial de futbol, que se jugo entre Chile y Argentina, con el consabido resultado a nuestro favor. El extracto específicamente presentaba al periodista en terreno pidiéndole a un transeúnte que relate lo que sucede en el partido al momento del gol, la respuesta por parte del individuo, tiene dos momentos a mi parecer, el primero, cuando relata con alegría y pasión el gol, pero con un dejo de formalidad y nerviosismo, sin liberar su pasión por el histórico suceso vivido en su totalidad, en el segundo momento, se le pide que relate nuevamente el gol, pero con algunas correcciones respecto del lado de la cancha donde se realizaba el gol y con algo mas de pasión, pero en el segundo 39 del video, el periodista esgrime una frase que a mi al menos me parece decidora, cuando le dice “olvídate que estas en la tele”, a lo que el personaje responde realizando un relato mas pasional y enérgico que la primera vez y una vez reproducido el gol, la persona grita a todo pulmón “gooooool” agregando luego de la frase, un modismo chileno tremendamente despectivo, pero al mismo tiempo, fuertemente expresivo de la pasión y cariño que sienten muchos chilenos por su emblema y sus éxitos.

Lo que me llama la atención de este suceso, es el cambio que surtió efecto en la persona cuando el entrevistador le dice que se olvide de que se encuentra en la tele, como si el ser parte de una emisión en vivo tuviese un elemento coercitivo mas allá del consciente del individuo que se encuentra participando del programa. También podemos observar en el extracto del programa, que la dicción del individuo no es la mejor, pero aun así, es capaz de articular un relato del partido de forma acabada y enérgica, que luego de la frase del periodista rompe con los esquemas pre-definidos y toma un tinte plenamente pasional. Esto, para mi, genera un nuevo enmarque de la teoría dramatúrgica de Goffman, ya que el individuo en televisión también representa un personaje, ya no solo en las teleseries, sino mas allá, el individuo que es presentado en televisión, se ciñe a un formato predispuesto que le obliga a presentarse de un modo estandarizado y formal, con el cual todos podamos entender su mensaje sin verlo distorsionado por la apariencia de quien lo emite o bien su postura corporal o cualquier otro elemento que pueda distorsionar nuestra comprensión. Creo que un claro ejemplo son los presentadores de los noticieros nocturnos, y que todos ellos presenten con terno y corbata en el caso de los hombres, o bien con vestido en el caso de las mujeres.

Como individuos televisivos esperamos encontrarnos con un cierto canon a la hora e observar televisión, y no nos mantenemos indiferentes a la hora de obtener algo distinto de lo que buscamos, se espera por tanto entre todos nosotros, un cierto aspecto o comportamiento de parte de los presentadores de los programas, especialmente los de contenido científico o informativo, y esto respalda la visión de la teoría del cultivo (Gebner, George), donde los medios logran generar un desplazamiento de la realidad y formar estereotipos que si no son encontrados, nos llevan a una disonancia, siendo que la sociedad misma esta plagada de diferencias y particularidades. Creo por tanto que esperamos encontrar una diversidad en lo social, pero no en lo mediático, ya que este mundo paralelo nos ha generado cánones que inclusive en ciertas esferas sociales debemos extrapolar. Por tanto, no esperamos que llegue un joven un mohawk a una entrevista de trabajo para un banco, pero si esperamos que lleguen 100 jóvenes con terno y corbata, ya que esta es la imagen de seriedad y profesionalismo que esperamos encontrar entre los individuos socializados bajo la influencia de los medios de televisión.

5 Responses to “¿Estoy en la Tele?”

  1. javier.villar Says:

    hola , yo creo que no es la TV quien nos dicta las pauta de comportamiento a los cuales nos ceñimos , sino que es al revés lo que esperamos como una expectativa normativa se refleja en la pantalla , en este sentido el tipo que habla por TV esta dejando ver sólo lo su lado anterior ( en opinión de Goffman) pero nosotros como televidentes tenemos claro que él esta comportándose en forma esperable , en este sentido no es la TV quien nos dice como comportarnos , sino que es una plataforma de actuación según nuestros fines .

  2. jennifer.dowding Says:

    Al parecer hay algo en los ternos y buenos trajes, algo que agrega mayores grados de credibilidad. Me pregunto que pasaría si los conductores de los noticiarios apareciesen en pantalla con jeans o con vestuario semi formal, ¿sería menor su credibilidad?. Es interesante reflexionar acerca del rol que juegan los «looks» en los medios de comunicación, específicamente en la televisión.

  3. carolina.quiroga Says:

    A mi parecer, y superando lo que señala Javier, creo que la relación que se establece entre la televisión, en este caso, y los sujetes, tiende a ser como señala Bourdieu tanto estructurante como estructurada. En éste sentido la televisión influiría en nosotros en la misma mendida que nosotros influimos en la televisión.
    En segundo lugar me parece que en el analisis que hace Francisco en un comienzo se tiende a intensificar un fenómeno que ya es conocido y analizado por varios autores. Efectivamente no creo extraño que los roles que se juegan en televisión reponden de manera directa a lo que Goffman postula. Es más, creo que en la televisión, incluso más que en las relaciones cara-cara, se establecen de manera más clara y fidedigna, un juego de roles interpretacionales dentro de los cuales se ciñe cada actor.

    En cuanto al efecto cohersitivo que genera la camara en el sujeto, cabe señalar que según la teoría de las nuevas técnicas metodológicas cualitativas, se ha investigado que en la medida que una camara (en este caso de fotos) penetra en un ambiente determinado ésta al igual que el invetsigador, generan algún tipo de influencia en los sujetos. (Esto puede verse en el documental «La ciudad de los fotógrafos)

  4. Patricia Says:

    Ya estar en la televisión, independientemente del rol que se cumpla en ésta, tiene directa relación con la interpretación de un personaje. Tal como señala Javier, existen ciertas pautas que rigen nuestro comportamiento. Pautas que se ven debidamente reproducidas en la televisión, donde todo es corrector; la dicción de quienes interactúan en ella, el vocabulario que utilizan para argumentar, los gestos, la vestimenta, etc. Todo es a dog al contexto televisivo. Y señalo contexto, porque hay una directa relación entre un determinado comportamiento y el contexto donde se desarrolla dicha conducta.

    Ahora bien, hay que señalar que, esa televisión “empaquetada” ha sufrido ciertas transformaciones. Sólo basta con mirar los noticiarios, donde el rol de los periodistas ya no se remite a leer el telepronter y listo; por ejemplo hoy hay más opinión, espontaneidad al momento de entrevista e interactuar con los corresponsales, “metidas de patas”, etc. Hasta el vestuario ha cambiado, principalmente en las mujeres. Siguiendo esta misma línea, hay que señalar la labor del Consejo Nacional de Televisión, el cual se pone cada vez más permisivo.

    Pero más allá de estas transformaciones que han sufrido los canon televisivos a lo largo de la historia, sigue primando la idea de que: estar en la televisión, implicar ceñirse a ciertas pautas que configuran una determinada posición del sujeto, donde la diversidad mediática, aún no forma parte constitutiva de este medio… Pero ¿es malo que existan estas pautas? Apelando a la democratización de los medios de comunicación, ¿es aceptable todo tipo de comportamientos y vocabulario en pantalla? ¿Dónde quedarían los límites?

  5. Carolina Casal Says:

    Creo que los cánones están en todas partes, en todo donde la sociedad pueda entrometer sus límites y temores. Sin embargo, la televisión y los medios son sólo una forma más en que se expresa lo que dicta lo social, lo que no la hace inviolable.
    Poco a poco hemos visto cómo se van rompiendo los esquemas en relación a la forma de comunicar, es decir, las noticias serán siempre las noticias y ese tipo de cosas no va a variar, pero con el paso de los años han aparecido nuevos programas, con nuevos temas y personajes, que han roto los esquemas de cualquier televita mayor de 50.
    Incluso, es cosa de recordar a ciertos personajes de las teleseries nacionales de hace un tiempo: el Mercader que era gay, Lola/Lalo, etc., que fueron tema de conversación entre nosotros sólo por eso, por ser un tema que no se había tocado con tanta naturalidad en la tele.
    Poco a poco se van abriendo nuevos horizontes, tal como la sociedad asume leeeentamente que existen personas diferentes, los medios van acomodándose a los distintos públicos a los que desean llegar.

Leave a Reply



Video & Audio Comments are proudly powered by Riffly