Prende tu Mente!!
El funcionamiento y mantenimiento de las sociedades se hace posible gracias a la comunicación, la que es, al mismo tiempo, medio y fin de la acción humana. El saber comunicar significa también saber dominar y poder controlar el devenir social; modelar las interacciones y determinar los intereses de los receptores. Los medios de comunicación han perfeccionado, profesionalizado y monopolizado el ejercicio de la comunicación; evolucionando desde la imprenta a la televisión como contenedores de la verdad respecto a todos los aspectos mundanos de la vida, y obteniendo control sobre las decisiones, expectativas y necesidades de todos los lectores, espectadores y televidentes. Nos muestran los eventos relevantes de la actualidad [según la percepción medial], que posición tomar respecto a estos, que comprar, vestir, comer, calzar, adorar, escuchar, ver, creer, defender, y desear. Se han convertido en una fuerza propagandística de modos de vida hegemónicos, entreteniéndonos constantemente para lograr distraer a las audiencias de los problemas reales de la sociedad, convirtiendo la comunicación en un negocio a la merced de los intereses económicos de los poderosos; generando adoctrinamiento y control.
Los medios han sido demonizados en innumerables ocasiones y citados como principales responsables de todos los males que asedian a la sociedad capitalista [la escuela de Frankfurt ya hizo su parte con la denuncia de la dominación y el control ideológico], pero aun cuando efectivamente esto se cumpla y nos veamos atrapados diariamente por corrientes incontenibles de información, publicidad y entretención; los medios de comunicación siguen constituyendo sólo una parte [aunque considerablemente importante] de la realidad y la interacción social. O acaso sólo por que la caja idiota diga que debemos opinar respecto a algo, tomar agua saborizada o regocijarnos con los detalles de la vida amorosa de personajes de dudosa notoriedad, significa que lo haremos? La televisión es una ilusión, un carnaval, nosotros somos la realidad; hasta que punto sentarnos frente a una pantalla nos roba autonomía, limita y adoctrina; nosotros somos el sustrato de la maquinaria social; es fácil apuntar hacia los grandes y poderosos conglomerados comunicacionales y condenarlo culpables por el atontamiento y la sedación de las personas alrededor del globo; pero dónde queda nuestra responsabilidad como individuos autónomos y pensantes, de nosotros depende el retomar y reclamar la comunicación como propia; dejando de victimizarnos frente a los “malignos efectos” de la comunicación mediática, apagando la televisión y activando nuestras mentes. Los medios nacieron para poder facilitar la vida humana entonces ¿Por qué dejar que la controlen?
abril 15th, 2009 at 19:52
bien. te cuencotr la razón en parte y en parte tb encuentro relelavante lo que cito el profesor en clase acerca de que los medos de comunicacion no nos dicen que pensar si no nos dan la carta de variedades de lo que podemos optar…algo así muy relevante tu argumento pero me gustari más que se hiciera realidad y de verdad la masa prenidera la mente!!
:)!
abril 15th, 2009 at 20:46
Aboslutamente de acuerdo…
¿Dónde queda el poder de decisión y la idea de autonomía de los individuos?. Si bien los medios de comunicación cobran cada vez más importancia, y se vuelven un medio de poder, que logra en gran medida monopolizar el ámbito de la comunicación, es nuestra tarea como sociedad intervenir en esto, y ser capaces de pensar, y de no asentar con la cabeza de forma automática frente a cada palabra o a cada imagen, con que la televisión nos bombardea minuto a minuto, con el fin de volvernos individuos pasivos y sin capacidad de reacción.
Como dice Mc Combs, los medios son «constructores de la realidad» pero la realidad mostrada por estos no es la única; no representa la verdad absoluta, y por cierto somos nosotros quienes debemos ser críticos ante ciertos contenidos comunicacionales, que cada vez más tienen menos de culturales y más de banalidad.
abril 15th, 2009 at 23:28
Me llama la atención el hecho que pongamos en cuestión nuestra autonomía como sujetos pensantes, como seres capaces de discernir lo que queremos y necesitamos de lo que no. Es indudable la hegemonía de los medios en la actualidad y que nos seducen con bonitas y llamativas propagandas, que nos crean falsas necesidades, que nos muestran una parte de la realidad, pero tal como dice Gabriela, somos nosotros quienes debemos tomar el control de ella, ser más crítico con lo que se nos entrega diariamente. Somos sujetos pensantes, por lo tanto, no deberíamos considerar a los medios como entidades todopoderosas dueñas de la verdad, capaces de maniobrar nuestras ideologías hasta el punto de caer en la realidad hegemónica a la que se nos impulsa diariamente.