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En el post anterior, me referí a la revolución digital que estamos viviendo, haciendo especial énfasis en la oportunidad que esto presenta. Todos y cada uno podemos darle el uso que queramos a la red, sin embargo, hay uno en específico que se está apropiando de la utilización de la red, la intercreatividad.
El concepto de intercreatividad, desarrollado por Berners Lee en 1996, es la suma de dos palabras, interactividad y creatividad, ahora, ¿qué quiere decir esto?, significa que el sistema está propiciando los mecanismos necesarios para que todos los usuarios de la red puedan crear productos, aportar conocimiento a los ya existentes o intercambiar intereses, todo esto bajo la premisa que todos los participantes somos iguales y tenemos el mismo derecho a formar parte de cualquier creación.
La clave de todo esto, tal como señala C. y Pardo en Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food , es que bajo esta idea es posible alcanzar un grado de conocimiento mayor y mejor que sólo beneficia a los que participan de la interacción en cuestión. Si bien existen diversos conceptos asociados a la idea de «lo colectivo», tales como Inteligencia Colectiva o Arquitectura de la Participación, todos apuntan a la idea de la colaboración y sobre todo destacando que entre todos, el conocimiento fluye de manera más rápida, es susceptible a crítica por tanto mejorable y evidentemente con esto todo se vuelve más rápido y participativo aún.
Relacionando con la idea del post anterior, es importante señalar que lo que se destaca es que todos quienes tengamos acceso a la red podemos formar parte de este «cerebro mundial», todos podemos editar entradas en Wikipedia por ejemplo, o comentar algún artículo si es que somos especialistas en algún tema o bien, podemos crear productos o enlaces que sirven o que sin duda a alguien le servirá.
Aprovechar, maximizar, participar, comentar, publicar, editar, denunciar (por que también hay malas prácticas o información poco fidedigna); son todas palabras que nos son propias y ahí está la clave de lo comunitario, de la nueva era que al parecer, va mucho más rápido de lo que podemos asimilar.
Resulta importante darse el tiempo para analizar lo que pasa, no sólo para tomar conciencia, sino para ser parte de lo que ocurre y es ahí donde está lo imperdible y lo que, en definitiva, puede transformar la red no sólo en algo útil sino en toda una experiencia.
Como ejemplo, el caso más típico es Wikipedia, cualquier usuario puede editar la información o contribuir con algo en todo tipo de asuntos, por ejemplo editar la información política de un país, lo que evidentemente, pudiera suscitar roces entre lectores.
Otro ejemplo de creación fácil y con alto alcance de viralización es Youtube. Esta plataforma permite subir casi todo tipo de archivos, convirtiéndolo en una de las páginas más importantes que existen hoy en la web, mediante ésta todos podemos interctuar y crear material en la red.
Para que todo esto resulte de la mejor manera, se tienen que dar ciertos factores necesarios de tal manera que todos tengamos la oportunidad asegurada de poder ser escuchados, leídos, auspiciados o al menos sentirnos parte de la web, tal como señala Surowiecki en The Wisdom of Crowds, diversidad e independencia son factores relevantes para que lo colectivo se vuelva productivo y se alcance realmente la suma de inteligencias.
Fuente: C. y Pardo H. (2007). “Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food”.
Me parece muy interesante tu post, puesto que aterrizas totalmente la teorpia de la intercreatividad que presenta Berners Lee.
Especialmente en el caso de un roce de la historia política de un país, como en el nuestro, es esencial el trabajo interactivo de los usuarios y que se trabaje la tolerancia, puesto que Chile en particular posee muchas aristas de una misma historia. Opino lo mismo para Youtube, ya que con sus botones de «Me gusta» o «No me gusta» da espacio para ver qué tan tolerante estamos siendo con el contenido que genera otro o en equipo desde la web.
Saludos!
Gracias por tu comentario Camila, tal como señalas es un aspecto interesante de la web,
Cariños,
Valentina.
Creo que tu título resume perfectamente lo que expresaste en tu post.
Este «cerebro mundial» al que aludes existe, precisamente, por el libre intercambio de conocimientos, experiencias, creaciones e interacciones. El papel del usuario ha generado una verdadera revolución digital y, gracias a la interactividad, Internet ha sufrido una notable evolución. Dichos usuarios tiene la libertad de situarse como emisores y creadores de contenido conformándose, de esta manera, la comunicación global.
¡Muy bueno!