Un medidor no tan confiable

Las comunidades electrónicas emergentes en la red han permitido crear, incrementar o renovar el capital social de quiénes la conforman y, muchos ven en esta razón y en el incremento del estatus, el motivo principal para participar en las redes sociales. Pero, ¿quién tiene estatus en la red y quién no? ¿Quién es influyente quién no lo es?

La abundancia y proliferación de comunidades virtuales reunidas en torno a un interés en común, ya no es novedad. Estas, con el paso del tiempo y el vance de la tecnología se han vuelto cada vez más influyentes en las redes sociales y también fuera de ellas; tanto así que estan siendo parte activa de la agenda noticiosa por la cual se rige el periodismo „tradicional“. Pero ¿qué es lo que motiva a los usuarios a crear su propio mundo virtual? Qué los incita a cambiar de cierta forma las relaciones cara a cara por las relaciones en la red?

En el texto „We the media“  de Shayne Bowman, Chris Willis y The Media Center at The American Press Institute, se explica que las razones advertidas hasta el minuto son varias: crear conexiones con otras personas que tienen intereses similares en línea y fuera de ellas, informar y ser informado, entretener y ser entretenido y, ganar estatus o conseguir reputación son algunas de ellas.

Comienza la competencia

Los múltiples usos de las plataformas virtuales y su influencia en los demás hace que ya haya comenzado una especie de competencia entre los usuarios de la redes por demostrar quién tiene más amigos o seguidores, más mensajes; más influencia en general. Es así como nace Klout (pag. Principal de Klout,  Blog oficial de Klout), un servicio web que mide la influencia que los usuarios de redes sociales tienen sobre otros ¿Cómo lo hace? A través de una  fórmula de 25 variables diferentes, tales como: cuántos seguidores tienes, qué tan importantes son éstos, qué tanto participan los evaluados en las redes sociales, en qué temas se especializan, etc. Con este análisis, Klout nos asigna una nota que puede variar entre 0 y 100 puntos, siendo aquellos que tienen una mayor puntuación los cuales poseen un mayor nivel de influencia en la red.

La puntuación de Klout utiliza datos de las redes sociales con el fin de medir:

  1. True Reach (Alcance real), que es el número de personas a las cuales llegan nuestros mensajes en las redes sociales, identificando y analizando de esta manera a los contactos relevantes.
  2. Amplification (Amplificación), es la probabilidad de que nuestros mensajes sean compartidos o comentados.
  3. Network Impact (Impacto en la red), se basa en las personas que tenemos en nuestros contactos o que nos siguen. Mide la influencia de nuestra audiencia. El resultado será más alto cuanto más influyentes sean considerados los usuarios con los que interactuamos usualmente.

Algunas de las redes analizadas por esta plataforma son: Twitter, Facebook, LinkedIn, Google+, YouTube, Flickr, Blogger, WordPress.com

Lo que el medidor no mide

No obstante, klout no es un „medidor de popularidad o influencia“ 100% confiable; desde un punto de vista bastante crítico y objetivo, nos encontramos con varias desventajas. Una de las principales quejas recaen en la obsesión de ciertas personas por obtener mayor popularidad en las redes sociales, provocando que hagan hasta lo imposible para aumentar el puntaje otorgado por Klout. Frente a esto, la “medición de influencia”, se transforma en una herramienta que dista mucho de aquello, y muta en una que simplemente mide y nutre el ego. Teniendo en cuenta lo anterior, existen bastantes “artimañas” que pueden otorgarnos mayor “influencia” como por ejemplo, el ser retuiteado o mencionado por usuarios con mayor nivel que uno mismo. Una manera fácil: insultar gravemente a todos los famosos que tienen Klout. En el momento en que me contesten, mi nivel de influencia sube increíblemente. Lo anterior, demuestra que las personas “influyentes” (quienes más puntaje en Klout poseen, no siempre lo son por motivos positivos o que puedan ser útiles para las marcas o la red en sí, y esto, es algo que Klout no es capaz de medir.´Así, si bien herramientas como Klout pueden orientarnos, no podemos formarnos una opinión basándonos unicamente en ella.

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5 respuestas a Un medidor no tan confiable

  1. Jorge Hernández dijo:

    Un comentario, si insultas a «influenciadores digitales», ¿no crees que esto perjudicará finalmente al usuario que quiere subir su Klout por medio de trucos? ¿Te molesta el uso de Klout? Creo que tu post pasa de un artículo de análisis a uno personal, contra la herramienta, sin desarrollar bien los argumentos. Me gustaría saber más de los defectos operacionales y metodológicos del software, ojo con interponer juicios de valor al respecto.

  2. Natalia Farías dijo:

    Personalmente no me molesta el uso de Klout, sin embargo, mi crítica apunta más a el uso exclusivo que muchos hacen de esto para determinar qué persona es influyente y qué persona no lo es, sin tomar en cuenta factores que Klout no puede medir indicadores reales (influencia cara a cara), por ejemplo.
    Ahora, si de defectos operacionales y metodológicos se trata, puedo mencionar que un aspecto que la plataforma debe mejorar y ampliar, es el tema de los idiomas. La página se encuentra disponible solo en inglés, por lo cual se deja afuera a quienes no manejen esta lengua (la información no fue antes agregada porque consideré que la extención de mi texto era suficiente).
    Saludos

  3. Natalia,
    Concuerdo bastante con tu postura. Sí hay varios tópicos que Klout no considera -personalmente, tengo un Klout de 63, lo que creo que es mucho para lo que hago- y realmente, no se si servirá mucho para medir la «inteligencia» de lo que el usuario produce, escribe, expresa o cuenta. Realmente, creo que todas las personas buscamos validarnos en la sociedad y, al tener una nota de nuestra influencia, lo que estamos haciendo es «creernos el cuento».
    Como se señala en «We the media», «el reconocimiento social viene con ser un revisor bien ranqueado. Los ‘administradores de reputación’ -como Klout- que permitieron a los usuarios y otros recomendadores calificarse entre sí, hicieron posible mercados de opinión que comerciaban casi enteramente en ego gratificación».
    Para algunos, esto sólo se justifica ya que muchos «desean establecerse como autoridad en un tema», por ejemplo, los blogs. Éstos parten de la base que el administrador quiere hacer valor su opinión, subir su ego.
    Si bien soy «63», me importa más ser Rocío.
    ¡Saludos!

  4. Nati, estoy totalmente de acuerdo cuando te refieres que la “medición de influencia”, que tiene Klout se transforma más bien en un alimentador del ego de los usuarios que en el medidor que promete ser.

    También hay que verle el lado positivo, ya que si consigues ser una «persona influyente» existe la posibilidad que una empresa se fioje en ti y te toma como rostro de campaña, lo cual puede ser un tremendo punto a favor.

    Considero que para participar de esta red social hay que tener un criterio formado, porque utilizar insultos a famosos es un recurso bastante básico que no requiere se mayor análisis al momento de redactar algo en la web (no hay que olvidar que lo que se sube a internet, se queda allí).

    Saludos!

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