Tras casi una década de vida, el evento, que en su primera versión había reunido cinco obras, contaba ahora en su programa 120 montajes, con 13 estrenos y una cada vez mayor presencia internacional. Ese año, se dejó definitivamente atrás la original sede de la Estación Mapocho, para distribuirse en 19 escenarios en diversas comunas de Santiago, y a la ya existente versión del Festival en la V región, se agregaron extensiones en la segunda y séptima regiones. El número total de funciones ascendió a 471 y el espectadores a 80.000. Estas cifras eran también un reflejo del crecimiento de la actividad teatral en Chile en los últimos años, con el surgimiento de nuevas compañía, la apertura de un mayor número de salas, la aparición de dramaturgos emergentes y un gran contingente de actores dispuesto a dar vida a la palabra sobre las tablas.

Entre las obras mostradas el verano de 2002, destacaron “Cara de fuego” de Marius Matenburg, montaje que había participado de la I Muestra de Dramaturgia Europea Contemporánea, evento que con los años se transformaría también en un importante referente de la escena teatral en el país. Entre los estrenos, resonaron con fuerza “Anatomía de un caballo”, obra referida a la pintora Delia del Carril, y “Te vas a morir de pena cuando yo no esté” de Pablo Illanes, guionista de televisión, quien debutaba en teatro. “Toda esa larga noche”, de Jorge Díaz, reveló testimonios de mujeres que fueron torturadas después del golpe militar de 1973, entre ellos el de la actriz Gloria Laso; el Teatro de la Dramaturgia Corporal , bajo dirección de Amílcar Borges, llamó la atención con “Eduardo II”, y el joven dramaturgo Cristián Figueroa exhibió “Mortajas”.

Entre las reposiciones, FITAM recibió destacados montajes de la temporada anterior, como “El círculo de tiza caucasiano” de Brecht, con el Teatro Nacional Chileno; “Edipo asesor” de Benjamín Galemiri, y “El desvarío” de Jorge Díaz, ambos éxitos de la VII Muestra de Dramaturgia Nacional, además de “El juego de las preguntas” con el Teatro La Puerta. Uno de los reestrenos más esperados fue “Eva Perón”, de Copi, bajo la dirección de Marcial di Fonzo Bo, en tanto que “Los ojos rotos”, dirigida por María Izquierdo, y “Loco afán”, de Pedro Lemebel, tuvieron también una gran recepción del público.

También la presencia internacional se vio reforzada en esta IX versión con la presencia de 11 montajes, traídos de 5 países. Entre estos, destacaron “Beckett”, una soñadora creación de la compañía Sobrevento de Brasil; “Hermosura”, con el grupo El descueve de Argentina, y “Maní tosta’o”, de Arte Dramático de Cuba.

En otros ámbitos, FITAM acogió la Muestra de Danza Contemporánea Danza a Mil, y se sumaron el I Encuentro Iberoamericano de Dramaturgia y el II Encuentro de Dramaturgia Contemporánea Chilena, organizados por la División de Cultura del Ministerio de Educación.