Blackberry…el nuevo hibrido
Caminando por las calles de “Sanhattan” cada día es posible encontrar más ejecutivos, con la espalda encorvada observando detalladamente a su Blackberry, también conocido para sus admiradores como Crackberry por su capacidad de crear adicción. El atractivo de este medio es fácil de comprender si nos damos cuenta de que es la única herramienta tecnológica a la fecha que consigue integrar lo que John. B Thompson llama interacción mediática, interacción casi-mediática y además, a diferencia de otros teléfonos, se acerca a una interacción cara a cara.
El Blackberry consigue llevarnos mediante herramientas como el Blackberry Messenger a una casi interacción cara-cara. Esta herramienta incluye la posibilidad de mandar videos, gestos y mensajes de voz permitiendo al emisor forzar “las palabras por medio de guiños y gestos, frunciendo el ceño o sonriendo, cambiando la entonación y cosas parecidas” (Thompson 1996: 117) una de las características esenciales de la interacción cara a cara. Pero a la misma vez que entrega el Blackberry, saca al individuo de la sociedad y de otras posibles interacciones cara a cara ya que el individuo encorvado caminando por la calle, o sentado en Starbucks, no esta abierto a una interacción mas allá de aquella que entrega su CrackBerry. Lo que me hace pensar ¿Hasta que punto es posible que un medio no desplace a otro? Especialmente si consideramos que se esta considerando incluir la adicción al Blackberry como una nueva enfermedad de carácter psiquiátrico.
abril 12th, 2009 at 18:10
Hola María del Mar, se agradece la remezcla de la tipología de Thompson. La Blackberry efectivamente es uno de los casos radicales de la «cultura de la movilidad», hipnotizante, absorbente, genera un entorno de bips y micro-alarmas permanentes, ubicuas y tecnosocializadoras. Una simulación social que, sin embargo, rompe la relación espacial y temporal natural de las personas, que ningún medio había llevado antes a estos niveles. Es una comunicación «cara a cara» artificializada que estandariza los símbolos con los cuales opera (Manovich). Llamarle a este objeto «Crackberry» sin duda apela a este nuevo escenario de «peatones tecnológicos» en el que se pierde la conexión con el espacio inmediato y, por consiguiente, las relaciones cara a cara que espontáneamente surgen en la urbe y otros espacios sociales.
abril 14th, 2009 at 21:57
Me surge la pregunta acerca de que es lo que produce, que estas nuevas tecnologias se vuelvan tan atrayentes para las personas.
¿nos resulta más facil relacionarnos mediante interacciones mediaticas o casi mediaticas? ¿Estas tecnologias sustituyen la real interaccion cara a cara?. El gran atractivo del blackberry, claramente como se menciona, se da porque permite cierta desconexión con la realidad. Pero el caer en adicciones de este tipo, me hace reflexionar acerca de que tan mala es la realidad para estas personas, las cuales prefieren vivir sumergidas en este medio que lidiar directamente con ésta.
abril 14th, 2009 at 22:27
No creo que estas tecnologías sustituyan la interacción cara a cara pero sí creo que como dispositivos electrónicos de redes sociales, que permiten un control del tiempo, el espacio y las relaciones personales, resultan fascinantes y adictivos. Al menos por un tiempo.
abril 15th, 2009 at 16:48
Yo creo que la adicción a este tipo de artefactos no se encuentra tan relacionada con una desconexión con la realidad. Esto porque el solo hecho de tener un blackberry, un celular u otro aparato de comunicación nos mantiene conectados a la realidad constantemente. En mi opinión la atracción por este tipo de artefactos está ligada a hacer la realidad algo más fácil y expedita. Con esto me refiero a la facilidad que otorga el blackberry y otros programas que permiten la comunicación impersonal para comunicar o afrontar hechos de la vida cotidiana con una mayor facilidad. Un ejemplo muy básico de esto es la utilización de mails para comentarle a alguien que está molesto con el/la o que necesitan hablar. Son estos nuevos medios de comunicación los que abren las puertas a una comunicación no presencial, lo que hace que me pregunte ¿Qué ocurriría si es que este tipo de medios no existiesen? ¿Podríamos comunicarnos cara a cara de manera natural frente a otro, o es que la dependencia a este tipo de artefactos es tal que ya no podemos dar un paso atrás?
abril 15th, 2009 at 18:38
Alejándome de un análisis psicológico-social más centrado en las atribuciones, moda, procesos de individualización, cognitivos, entre otros, en relación a esta «enfermedad de caracter psiquiátrico» generado por el CrackBerry en los individuos, me parecería interesante ver este fenómeno de adicción desde el planteamiento de la TAR (Teoría del Actor Red).
Desde esta perspectiva tanto actores humanos como no-humanos poseen capacidad de agencia. Con esto se propone ver la movilidad en la acción de los agentes, pero también tomar en cuenta la de los objetos -como actantes-, en este caso el Blackberry como objeto móvil, transformando una red de relaciones compuestas por todo tipo de elementos heterogéneos. Ir más allá de las representaciones sociales que se tienen de este objeto, sino mas bien identificar su rol en las interacciones humanas, superando la dicotomía sujeto-objeto y la imagen del Blackberry como objeto que «domina» al individuo.
abril 15th, 2009 at 19:54
Mi opinión también se asemeja a la de Pedro, en que esta adicción hacia los artefactos tecnológicos no se debe a una desconexión con la realidad, se está en contacto con esta, la comunicación se hace más facil, pero ….¿qué tan personal se vuelve la comunicación? Y sí hay una mayor dependencia hacia estos dispositivos. No creo que estos medios lleguen a reemplazar la interacción cara a cara, pero sí que se esta dedicando mucho tiempo a este tipo de comunicación y que esta se está volviendo más impersonal.
Pienso específicamente en los medios como msn o mail en dónde se pueden decir aquellas verdares incómodas,o se puede ser más «dicharachero» lo cual resulta ser beneficioso para la comunicación, el problema es que siempre se este recurriendo a través de estos medios a decir lo incómodo , y en la interacción cara a cara se actúe como si no pasó nada…
abril 15th, 2009 at 19:59
Mi opinión también se asemeja a la de Pedro, en que esta adicción hacia los artefactos tecnológicos no se debe a una desconexión con la realidad, se está en contacto con esta, la comunicación se hace más facil, pero ….¿qué tan personal se vuelve la comunicación? Y sí hay una mayor dependencia hacia estos dispositivos. No creo que estos medios lleguen a reemplazar la interacción cara a cara, pero sí que se esta dedicando mucho tiempo a este tipo de comunicación y que esta se está volviendo más impersonal.
Pienso específicamente en los medios como msn o mail en dónde se pueden decir aquellas verdares incómodas,o se puede ser más “dicharachero” lo cual resulta ser beneficioso para la comunicación, el problema es que siempre se este recurriendo a través de estos medios a decir lo incómodo , y en la interacción cara a cara se actúe como si no pasó nada…
abril 15th, 2009 at 20:52
Yo tampoco creo que estas “nuevas tecnologías” sustituyan la interacción cara a cara. Es más, creo que estos dispositivos electrónicos permiten mantenernos siempre comunicados e informados. Es cierto que se trata de una interacción impersonal, pero lo importante es que la GENERA.
Estamos insertos en una sociedad cada vez más individualizada, donde poco importa lo que ocurre al otro (y con esto me refiero a las personas que SI están inmersas en nuestra realidad y no al famoso o no tan famoso del cual sabemos casi toda su vida privada… pero bueno este es otro tema que espero desarrollar en un posible post).
Ahora bien, específicamente hablando de la Blackberry, no me dirán lo útil (y a veces necesario) que resulta saber al instante los comunicados que emiten los profesores, por mencionar un ejemplo. O no me dirán lo fascinante que resulta conocer de manera inmediata la información que nos está llegando desde algún lugar del mundo. Creo que más allá de criticar a estos nuevos medios de comunicación e información, lo importante es poner el foco en quienes los utilizan y por qué llegan a un punto donde se extraen de la “realidad”, a tal manera de evadirla completamente.
junio 15th, 2009 at 19:23
Hola … yo creo que teneis toda la razon al decir que claramente usamos estas formas de comunicacion para mantenernos constantemente conectados lo cual genera, a la larga, relaciones bastante ficticias e impersonales construidas en base a redes. Aun asi creo que la adiccion pasa tambien por necesidades creadas que estos artefactos nos generan, una vez que estas 100% conectados con lo que sucede en la red es dificil desconectarse y es dificil retroceder un paso en este avance mediatico.
octubre 23rd, 2010 at 20:36
con todo respeto les puedo decir que creo que ninguno de los que opinan en este foro tiene la menor idea de lo que es el Blackberry. esta tarde platique con mi hija que tiene un aparato hace seis meses. ella pertenece a un grupo de 50 amigos que se envian mensajes constantemente. el BB le ha permitido estrechar su amistad y relaciones con estos amigos, su comunicacion permanente gira sobre temas de interes comun como bromas, anecdotas, tareas, solucion de problemas, difusion, apoyo, etc. de esta forma se ha fortalecido un grupo de cincuenta personas que gracias a este medio ahora pueden socializar de una forma mucho mas cercana que por medio de un celular o cualquier otro medio. he quedado gratamente sorprendido y preocupado por el acance del BB ¿que nivel de organizacion y control se puede llegar a tener sobre un grupo cohesionado por medio de un instrumento como este?