Pandemia de la paranoia

No hace muchos días se ha ido desarrollando en los medios de comunicación (iniciando principalmente por medio de la televisión, y la prensa) el caso de la Influenza tipo A (Mas conocida como Gripe Porcina) la cual ha tenido sus comienzos en México y Estados Unidos, y que luego se ha ido expandiendo por el resto del mundo en un tiempo muy corto, y paulatinamente.

Es impresionante la rapidez con que la información fue llegando a los distintos lugares de la tierra, donde se ponen una vez más en evidencia la efectividad de los medios de comunicación en relación a su instantaneidad y calidad para llegar rapidamente hasta los lugares mas recónditos del planeta bajo el amparo de la aldea global interconectada permanentemente bajo un sueño desarrollado con el Memex de Bush; pero al mismo tiempo se pone también en evidencia las falencias de este modo de  funcionar globalmente conectados: por un lado desde la perspectiva de la propia interconectividad entre los países, donde estar en diferentes naciones(ya sea por razones laborales, turísticas, etc.) es más común, mientras que por otro lado tenemos el efecto de los medios de comunicación por sobre las personas, donde muchas veces no hay filtro en la cantidad ni en la calidad (en relación a la efectividad concreta de que los hechos que se relatan son verídicos): esto lo escribo, debido a que recuerdo un día haber estado en casa y haber prendido la televisión en la mañana, puntualmente canales nacionales, en donde el principal tema de conversación era la Gripe Porcina y podían estar conversando horas y horas sobre el tema. Por otro lado la radio, entregaba información de posibles propagaciones de esta enfermedad en nuestro país (Por ejemplo caso de niñas en Pichilemu) y en lugares cercanos como Perú y Argentina. Y al mismo tiempo, recuerdo en la semana la intervención de la Presidenta en la exposición de información que se está dando en los medios, en un intento de calmar a la gente que ya estaba tomando medidas en consideración a la enfermedad: de hecho recuerdo escuchar muchas veces el comentario de que las mascarillas en muchos centros médicos ya estaban agotadas, junto a las innumerables consultas a hospitales lideradas por el Hospital del Tórax.

Al mismo tiempo es posible ver, a raíz de lo recién expuesto (por un lado de la interconectividad, mientras que por otro, lo que los medios de comunicación intervienen en la cotidianeidad)  los casos de prevención que van tomando en todos los países, como por ejemplo las cancelaciones de vuelos a México, en las que muchas veces son vistas como casos de discriminación contra la nación entera demostrando el descontento de quienes provienen de estos sectores, llegando a su máxima expresión en situaciones masivas-cubridas al mismo tiempo por los medios de comunicación- como son, por ejemplo los partidos de fútbol (Caso con jugadores de Chivas en el partido con Everton y el trato como «leprosos», que luego desencadena la reacción en uno de sus jugadores de fútbol—>ver aquí).

Frente a toda esta problemática, nace mencionar nuevamente el rol que tienen los medios de comunicación, y principalmente los efectos que van desarrollando en las audiencias masivas, temas que se van generando en las interrelaciones casi mediáticas, y cómo se van abordando en las de la Realidad con mayúscula, en las interacciones cara a cara, cuando se está frente a un mexicano, cuando un pariente tiene que viajar fuera del país, etc. Lo que sí se puede mencionar es que la inseguridad se ha instalado gracias a la propagación de la información naciente en México y Estados Unidos, lo interesante es saber ¿hasta qué grado se manifiesta en las personas en la cotidianeidad?

12 Responses to “Pandemia de la paranoia”

  1. carolina.casal Says:

    creo, al igual que tú, que los medios de comunicación son capaces de generar grandes efectos en su audiencia.
    a mi parecer, el caso del A H1N1 es un ejemplo del pánico que pueden producir los medios, y que lamentablemente carecen de real contenido cuando se trata de los «pronósticos» que entregan los mismos.

    y por otra parte, creo que el efecto de los chanchitos fue más mediático que de carácter médico. su instalación en la cotidianeidad fue sólo una táctica de distracción mundial, que va a durar lo mismo que el caso McCann, la muerte de Lady Di, el efecto Obama, etc.

  2. catalina.soto Says:

    Los medios de comunicación son fuentes priomordiales de información. En el caso de la «influenza porcina», los media actuan como canal de advertencia mundial; en este sentido la relevancia que adquiere este acontecimiento, tiene directa relación con las naciones en donde se gesto este brote. México y Estados Unidos son países cosmopolitas, donde existe una gran cantidad de emigrantes, por lo cual las posibilidades de contagio aumentan.

    Los medios de comunicación, no solo crean realidades, si no que tambien reflejan e informan realidades. Creo que los medios, en el caso del AH1N1, no fomentan la crisis y la paronoia, si no que muestran una realidad inminente, ya que los 1550 casos de infección en el mundo donde Guatemala fuel el último país en padecer, no son elementos de ficción.

  3. admin Says:

    Estimados, hay que tener especial ojo y cuidado con lo que los medios están informando en estos casos, esta gripe porcina ha sido un ejemplo concreto de agenda-setting global. La rápida propagación viral que tienen las noticias gracias a Internet, amplifica preocupaciones mundiales. De aquí en adelante, serán cada vez más comunes este tipo de acontecimientos. Es necesario estar muy buen informado y diversificar las fuentes con las que creamos nuestra opinión, no basta con una sola. Recordemos que, lamentablemente, estos hechos sirven también para captar la atención de las audiencias, por eso, en la TV extienden por horas y horas escasa información de una misma noticia. Al respecto, algo interesante debe estar pensando Naomi Klein, a propósito de la Doctrina del Shock:
    http://www.naomiklein.org
    Este tema lo debatiremos en clases.

  4. yael.rapaport Says:

    Creo que Chile sería el país más paranoico con respecto a la fiebre porcina. Comentarios como el de Girardi: «… podrían morir 100 mil personas…» No ayudan a mantener la calma. Realmente creo que nos caracterizamos por estar manejados por una elite, que de cierta forma, se refleja en los medios de comunicación, que no sabe enfrentar situaciones difíciles. Es por esto, que la consecuencia la pagamos todos, entrando en pánico y agotando las mascarillas. Chile parece el epicentro de la pandemia y no un país donde no se ha identificado un solo caso. Y esto es culpa en gran medida de los deficientes medios de nuestro país.

  5. admin Says:

    Yael, tienes razón en lo que dices, aunque no creo que estemos «manejados» por una elite. Más bien creo que en Chile no hay un concepto de medios de comunicación social que informen y guíen a los ciudadanos en situaciones de alta incertidumbre. Es parte de nuestra inmadurez institucional (al menos en términos mediáticos).

  6. pedro.varas Says:

    Concuerdo con la idea de que hay un problema «lógistico» que se ha ilustrado muy claramente con el fenómeno de la gripe porcina: la información es capaz de viajar rápida y fluidamente a través del mundo, pero no hay estándares formales ni profesionales claros que regulen la veracidad y calidad de esta información (o, cuanto menos, sobre cómo se transmite y difunde).

    En Chile se vivieron días en donde los noticieros y la prensa escrita no hacía otra cosa sino destinar tiempo y recursos a cubrir lo que parecía ser una epidemia absorvente y mortal. Se hablaba de 100 y tantos muertos en México, pero nunca se mencionó que para semejantes cifras debían existir cerca de 20.000 enfermos confirmados… en nuestro país se agotaron las mascarillas la semana pasada, y hasta el día de hoy no ha habido ni siquiera un caso confirmado. En mi opinión, creo que hay que cabe reflexionar respecto a con qué responsabilidad asumen los medios de comunicación su rol de «generadores de opinión» (y, además, preguntarse al servicio de quién es que generan esa opinión).

  7. yael.rapaport Says:

    Hoy en La Segunda, sale en la portada: «Concepción: aíslan a norteamericano por posible contagio de gripe porcina». Luego de leer la crónica, se concluye que realmente no hay ninguna prueba de que el señor de Atlanta tenga dicha enfermedad. Quizás está contagiado, espero que no, el punto es que se demuestra que los diarios y otros medios son expertos en crear pánico en la población. Espero que pronto llegue la madurez institucional. Y que el escenario sea distinto en un par de años más.

  8. daniela.mena Says:

    Concuerdo con la Yael en que los Medios de comunicación tienen muca responsabilidad en la audiencia, pero especificamente en el caso de la gripe porcina, son los mismos medios quienes exageran mas la situacion y crean en las personas un panico insostenible que ni los consultorios ni las farmacias dan a vasto con tanto pedido de mascarillas y de vacunas por la influenza.
    Ahora, no le quito importancia ya que es un tema con el que hay que estar alerta y tomar las medidas de prevencion necesarias, pero tampoco se trata de atemorizar o más bien aterrar a las personas.
    Creo que la funcion de los medios de comunicacion es esencial, y tal como nos comunican que es lo que pasa en el mundo, también deberían tener un poco más de cuidado en como lo comunican , ya que sobretodo las noticias son un medio muy creible para los televidentes y si estos dicen: Alerta, podrían haber mas muertes de la que creemos…Las personas lo creen y sólo estan logrando panico en la poblacion y que estos se automediquen.

  9. mariajose.labra Says:

    Rescatando varias de las ideas antes expuestas, al parecer los medios de comunicación en Chile efectivamente están más preocupados del rating que les da una noticia como la de la Fiebre Porcina, que de informar o educar a la población. Es así como se hace visible la dudosa labor informativa y preventiva de los medios y lo que es peor, el “mal uso” que hacen de los problemas serios en pro de obtener mayor número de telespectadores. Es así como además de “informarnos” sobre un tema se “usa” a ciertas noticias como un medio para un fin (rating) maximizando y sobredimensionando una situación que por lo demás, logra penetrar en nuestras conciencias y transformarse en “el tema” del momento (como dijo el profesor agenda Setting). Además, creo que el caso de esta fiebre es una clara muestra de como la “casi interacción mediática” nos hace creer que estamos más cerca del contagio de lo que quizás es en verdad; Esto al fundamentar nuestras interpretaciones en una noticia que nos “muestra la realidad” más que para protegernos de la Fiebre Porcina, (al parecer) para “engancharnos” con el tema.

  10. nicole.olivares Says:

    Como el profesor dijo, este caso demuestra la teoría de Agenda Setting en su totalidad y la inmediatez de la información.

    Y aunque considero que los medios cumplen con su rol informando en profundidad que es lo que pasa en Chile y el mundo, encuentro que en este caso fue una exageración. Causaron una verdadera paranoia en nuestro país y tuvieron una real influencia en los consumidores mediales, los cuales no supieron filtrar la información y los medios tampoco lo hicieron, porque maximizaron un tema que sigue siendo relativamente lejano y lo transformaron en una tragedia local.

    Concuerdo con Catalina que los medios cumplieron con informar sobre la gripe, sobre los casos más graves como México y EEUU, y de advertir a la población sobre sus efectos. Sin embargo, creo que hubo una sobreexposición del tema.

  11. Francisca Laso Says:

    Creo que es en estos casos donde las audiencias tienen que darse cuenta de la hegemonía y la univocidad de los medios, y buscar más fuentes de informacion para no caer en el pánico del que muchos han hablado.

  12. eduardo.lopez Says:

    Con respecto a todo lo que han comentado referente a la gripe porcina, en su periodo en que todavía no llegaba a nuestro país y la mediatización que ocurrió por parte de los canales nacionales, creo que concuerdo con lo que las diferentes voces han dicho sobre, por ejemplo, lo que ocurre con la agenda setting, y lo vinculado al caso de las audiencias desinformadas con respecto a un tema en particular, en donde si bien es tarea de los medios de comunicación es informar y promover estrategias de prevención, debido a las características de ser una situación de riesgo, no venía al caso la sobre explotación del tema en canales nacionales, que muchas veces, como maria jose mencionaba, estaban vinculadas a la obtención de rating, no teniendo así claras formas de guiar a la poblacion nacional por parte de los medios de comunicación como menciona nuestro profesor.
    De esta manera se van generando inconsistencias en las prácticas de los individuos, como es el caso de Concepción que planteaba Yael; y que ahora, con la gripe presente entre nosotros, se ve reflejado en situaciones en el metro, desde actitudes hasta discriminaciones a personas.

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